Había una vez tres cerditos que vivían en la misma casa.
Entonces el cerdito más joven se hizo una casa de palos, el cerdito mediano se la hizo de piedra y el más mayor se hizo una de cemento.
Y había un lobo que llevaba tres meses sin comer y que veía a los cerditos como chuletas andantes.
Cuando los cochinillos le vieron, corrieron hacia sus casas, y el lobo pensó:
- ¿Qué podría hacer para comerme al cerdito más joven?
Decidió coger su mechero e incendiar la casa.
El cerdito corrió hacia la casa de piedra del hermano mediano, pero entonces el lobo sacó su pico dispuesto a derribar la casa.
Los dos cerditos huyeron hacia la casa de su hermano mayor. El lobo descubrió que podía bajar por la chimenea, pero se quemaría. Así que cogió muchos cubos de agua, inundó la casa y los cerditos se ahogaron.
Finalmente el lobo disfrutó de su festín y se fue contentillo comiendo cochinillo.
Rafael Ramos 5ª B (Autor e ilustrador)
Otro final, original. Las chuletillas están muy buenas.
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