Esta es una tarde de domingo rara. Es la primera tarde del verano (sí, el verano comenzó esta mañana a las 7:46 horas, ya sé que a vosotros os pilló durmiendo). Mañana es día de clase, pero no hay clase; tristemente, no podremos disfrutar con las mates. Por cierto, y si no vamos a dar clase, ¿por qué tenemos que ir al cole?
Es la tarde del último domingo del curso. Luego vendrán más domingos sin lunes que madrugar. Para muchos de vosotros todos los días serán domingos. Y os aburriréis como os aburrís los domingos normales, pero aún más, porque es muy aburrido que el día que sigue al domingo sea otro domingo, y luego otro, y otro...
Bueno, que me estoy liando casi más que el día que descubrí quién era Hanna Montana.
Os dejo con esta preciosa canción de Amaral. Nunca he visto un texto tan necesitado de tildes, no hay ni una, ¿será cosa de la crisis, del cambio climático del clima? Una de estas tardes raras de domingo que estéis aburridos, contad cuántas son las tildes que faltan y nos lo contáis a los demás.
Es la tarde del último domingo del curso. Luego vendrán más domingos sin lunes que madrugar. Para muchos de vosotros todos los días serán domingos. Y os aburriréis como os aburrís los domingos normales, pero aún más, porque es muy aburrido que el día que sigue al domingo sea otro domingo, y luego otro, y otro...
Bueno, que me estoy liando casi más que el día que descubrí quién era Hanna Montana.
Os dejo con esta preciosa canción de Amaral. Nunca he visto un texto tan necesitado de tildes, no hay ni una, ¿será cosa de la crisis, del cambio climático del clima? Una de estas tardes raras de domingo que estéis aburridos, contad cuántas son las tildes que faltan y nos lo contáis a los demás.
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